Visitar un museo es más que aprender

Visitar un museo no tiene por qué ser solo una actividad educativa, siempre podemos buscar el placer intelectual, sensorial o estético que estos pueden ofrecernos.

Es decir podemos ver los museos como espacios en los cuales  desarrollar nuestra capacidad intelectual interactuando con las diferentes piezas o exposiciones que están a nuestra disposición. Además de la interacción que creamos con el arte al visitar un museo podemos incluir el placer multisensorial (oído, vista, tacto, olfato, gusto) que este nos transmite, es decir desfrutar del arte. La experiencia siempre puede mejorar si tenemos un conocimiento previo de lo que vamos a ver pues nos dejará profundizar más, cuestionarnos acerca de los objetos o relacionar la información que ya teníamos con las obras de arte que vamos a ver.

Visitar un museo

Algunos sitios de donde podemos sacar información antes de ver un museo son en sus trípticos o guías breves. Es más, visitando su página web previamente siempre obtendremos información sobre las obras y autores del museo, esto también nos puede servir para seleccionar las partes más atractivas y por las que queremos empezar.  Según el tipo de museo que vayamos a ver nos serán de utilidad unos mínimos conocimientos, por ejemplo en un museo de pintura los conocimientos de mitos, historia o religión nos pueden ayudar a la hora de reconocer la imagen que un artista ha plasmado.

Estando en el museo te podemos dar algunas recomendaciones para percibir el arte de otra forma. En un museo de arte por ejemplo puedes dejarte llevar por las características de la pieza, los colores, la combinación de estos o las formas. Esta interacción con el arte te puede transmitir nuevas sensaciones y hacerte conectar con un juego óptico, lo que el autor pretendía, una representación abstracta o algo irrealista. Tras esto cada persona podrá hacer una valoración personal del arte pues no para todos el concepto de belleza es el mismo…  A la hora de interactuar también os recodaremos que es importante oír, no todos los museos tienen el mismo ambiente de silencio de hecho las catedrales suelen tener un ambiente más frío y solemne. Si hablamos del tacto hemos de ser cuidadosos dado que en la mayoría de museos está prohibido tocar, excepto en los de ciencias ahí debemos experimentar con todo. En cuanto al gusto y al tacto los reservaremos para los museos de alimentación, donde podremos estimular estos sentidos. Cabe mencionar que en algunos museos si se centran en el estímulo de todos los sentidos y quieren provocar reacciones a sus visitantes.

Así que recuerda tomarte tu próxima visita a un museo como una experiencia divertida para tus sentidos de la cuál puedes hacer una pequeña investigación previa.

Visitar un museo

 

Fuente: Ese extraño lugar llamado museo. Guía breve para sacar e máximo partido a tus visitas al museo  – Ed Chroma Cultura